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domingo, 20 de octubre de 2013

Los Chicharro: De la barraca del abuelo a la inmobiliaria regional que debuta en Santiago

 


  • En 2014 aterrizarán en la capital con un proyecto en Ñuñoa. Y a fin de mes empiezan a entregar los departamentos de una obra que califican de emblemática, en Coquimbo, a pasos del casino. 
Fuente: El Mercurio
"Cuando Ecasa partió en regiones había mucho menos competencia que hoy. Las regiones están convertidas en Santiago, y lo único que tenemos que aprender ahora es a difundir nuestro proyecto en una ciudad más grande", dice Álvaro Chicharro, presidente ejecutivo de Ecasa.
“Cuando Ecasa partió en regiones había mucho menos competencia que hoy. Las regiones están convertidas en Santiago, y lo único que tenemos que aprender ahora es a difundir nuestro proyecto en una ciudad más grande”, dice Álvaro Chicharro, presidente ejecutivo de Ecasa.
Santiago, Chile. 18 octubre, 2013. Cuando iba al colegio, las vacaciones de verano de Álvaro Chicharro Gil no eran de tres meses. Pasaba varias semanas en la empresa familiar ayudando en la bodega o cargando cemento en camiones en el negocio ferretero que fundó su abuelo Calixto Chicharro, en 1912, primero como barraca Santa Helena y luego a partir de la década del veinte con el nombre de Calixto Chicharro Materiales de Construcción.
La empresa tenía un solo local en la calle Irarrázaval, en Santiago, pero empezó a crecer, hasta que en 1987 cambió de nombre a Chicharro S.A., que llegó a tener 16 locales repartidos en distintas ciudades, como La Serena, Santiago y Chillán.
En 1997, Chicharro S.A. se asoció con las empresas de las familias Eguiguren y Corbella, y formaron Construmart. Esa fue la firma que en 2011 vendieron al grupo Saieh y que hoy está nuevamente a la venta.
Con toda esta historia a cuestas, era natural que se atrevieran a cruzar la vereda y participar en el negocio de la construcción. En 2001, Álvaro Chicharro, su hermano Carlos -que falleció- y su cuñado Patricio Legarreta, casado con María Nieves Chicharro, fundaron Empresa Constructora Azapa Sociedad Anónima, Ecasa.
Desde entonces, cuenta Álvaro Chicharro, han actuado bajo la siguiente máxima: aprender de la actividad antes de lanzarse en grande.
La misma que aplicó antes de competir en el Dakar. Participó en varios rallies en su moto, hasta que a comienzos de este año debutó en la competencia internacional. Con su boggie partió en Lima, pero no llegó a la meta en La Moneda, pues en la ruta Arica-Calama fue embestido por un jeep. Por esto, en 2014 repetirá la apuesta con su hijo Álvaro como navegante, con el objetivo de llegar a la meta.
Debut en Villa Alemana
El primer proyecto de los Chicharro y sus socios fueron 56 casas en Villa Alemana, de precios que rondaban las UF 1.000. “Como política, creíamos que era mucho más fácil competir en provincias que en Santiago”, cuenta Álvaro Chicharro, socio y presidente ejecutivo de Ecasa.
La firma, que en sus orígenes surgió como especialista en segunda vivienda, hoy ha construido 280.000 m2 y en ejecución tiene 126.000 m2 más. Emplea a más de 1.000 personas, el año pasado tuvo ventas por US$ 55 millones, y este año prevé ventas por US$ 90 millones.
La compañía tiene filiales creadas para distintos proyectos e incorpora a socios en sus iniciativas, como la familia Peppi, que tiene negocios agrícolas; José Miguel Letelier y Luis Eguiguren, socios fundadores de la corredora Fynsa, y su hermano Gustavo Chicharro, quien no es socio de la matriz de Ecasa, pero participa en proyectos puntuales.
Los socios de la matriz de Ecasa hoy son la sucesión de Carlos Chicharro, que era un destacado deportista de esquí náutico y falleció en 2008; Patricio Legarreta y Álvaro Chicharro, cada uno con 29,1% de participación. Además, Marcos Carvajal, gerente general de Ecasa, con 9,7%, y Ernesto Valdés, gerente de construcción, con 3%.
Apuesta por La Serena
La Serena merece un capítulo aparte en la historia de la inmobiliaria de los Chicharro. Debutaron en 2004, con un proyecto mixto, de casas y departamentos en sociedad con la familia Peppi, cuando la idea de vender departamentos allí era tildada como una locura. Las ventas no estaban buenas, “y lo que se había hecho en la Avenida del Mar no era de muy buena calidad, había mucha humedad”, recuerda Chicharro. Pero el terreno que tenían era bueno para casas y departamentos, asegura. “Sin embargo, cuando desarrollamos el proyecto y fuimos a nuestro socio estratégico, los bancos, me tildaron de loco por querer hacer un proyecto inmobiliario en altura, porque no se vendía”, indica.
Se lanzaron con un piloto, y al cabo de unos meses tenían un gran porcentaje prevendido. Con este argumento volvieron a los bancos, los que le prestaron plata para hacer la obra.
También en La Serena se ubica Jardín del Mar, el proyecto que Chicharro califica como “emblemático” para Ecasa. Son dos edificios habitacionales de 27.000 m2 y 26 pisos, más 2 subterráneos cada uno, ubicados en la Avenida del Mar, a pasos del casino, en el antiguo paño de las Cabañas Jardín, de la familia Dayre. La inversión que está haciendo la empresa es de UF 1.600.000, US$ 73,8 millones. Y empezarán a entregar los primeros departamentos de este proyecto a fin de mes.
El salto a Santiago
Pese a que, en rigor, Ecasa ya debutó en la Región Metropolitana, con un proyecto de 70 casas en Colina hace 5 años, Chicharro dice que el próximo año será el aterrizaje en la capital.
Ecasa es dueña de un terreno en Ñuñoa, y está estudiando la posibilidad de hacer un edificio de entre 15 y 20 pisos, que empezaría a construir el segundo semestre del próximo año.
Aunque en principio el proyecto lo harán los cinco socios de la matriz de Ecasa, no descartan invitar a algún inversionista.
Sus otros negocios: Pub Licity, cantera de mármol y galvanizadora
La familia Chicharro participa en otros negocios además del inmobiliario. En sociedad con Gabriel y Ricardo Délano, son dueños del Pub Licity. Aunque alcanzaron a tener tres restaurantes bajo esta marca, hoy solo conservan un local en avenida El Bosque. “Seguramente en el futuro vamos a explorar asociarnos a una cadena o vender. Tener un local, no tiene mucha lógica”, señala Álvaro Chicharro.
Por estos días está incursionando en un nuevo negocio, el mármol. Junto a la sucesión de su hermano Carlos, y a Patricio Legarreta y a Gustavo Chicharro se unieron a un grupo de socios integrados por Hermann von Mühlenbrock, presidente de Sofofa; el abogado Francisco Urenda; Heriberto Urzúa, director de empresas, y el economista Jaime Bellolio, que compró Travertinos Atacama SA., en Calama.
La idea no es solo extraer el mármol, sino también llegar al cliente final con material para pisos o cubiertas, explica Chicharro.
También con su hermano Gustavo y la sucesión de su hermano Carlos, es dueño de Mygsa, una maestranza con planta galvanizadora ubicada en San Bernardo, que provee acero para sectores como la telefonía, la minería y el sector eléctrico.