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miércoles, 4 de julio de 2012

Principales firmas del sector productivo están preparadas para enfrentar escenario de iliquidez

El sector inmobiliario y de construcción se encuentra más comprometido con obligaciones a menos de un año con las entidades financieras y el público.

Fuente: El Mercurio

Santiago, Chile. 3 julio, 2012. No habrá grandes necesidades de refinanciamiento en el corto plazo para las empresas chilenas. Al menos así lo revelan las cifras globales de endeudamiento que declaran 52 empresas productivas del país que operan en minería, comercio, electricidad, construcción, forestal y pesca.
Las compañías analizadas tienen pasivos totales por $52,2 millones de millones, de los cuales sólo un 34% vence antes de marzo del año entrante. Si bien entre diciembre de 2011 y marzo de 2012 la deuda corriente se incrementó en torno a 3,4%, las obligaciones tomadas con el público o entidades financieras que tienen vencimiento a menos de un año crecieron 10%.
Hay que tener en cuenta que cuando se producen crisis financieras como la que se vive en los países desarrollados, un escenario posible es que en nuestro país se reduzca la capacidad de refinanciamiento por parte de las compañías en el mercado de capitales. Por eso es relevante revisar el grado de vulnerabilidad que tiene una compañía frente a un escenario más adverso, y entre los indicadores que se chequean está el endeudamiento.
Uno de los índices utilizados es la proporción de deuda de corto plazo respecto a la de largo plazo, entendida la primera como la que vence antes de un año. En general, se indica que mide la vulnerabilidad de la firma ante un evento en que la empresa requiera efectivo.
En tanto que el ratio de liquidez intenta mostrar la solvencia de la empresa, porque señala la aptitud de la compañía para enfrentar sus obligaciones financieras. Si este indicador es alto, puede ser tomado positivamente por los que otorgan crédito, porque reduce el riesgo; pero si es demasiado elevado, puede sugerir que los inventarios también lo están. Un indicador bajo puede hablar de apalancamiento para hacer crecer el negocio, entonces los accionistas se inclinarían por un índice un poco más bajo que un potencial acreedor, explican en Nevasa. En todo caso, el benchmark que generalmente se usa es 1,5 veces.
También resulta relevante cuánto de los pasivos es contraído con las entidades financieras o con el público, pues allí hay una menor capacidad de negociación a la que se tiene cuando se encara a proveedores.
Por último, el Ebitda/gastos financieros indica la capacidad del flujo de caja para hacer frente a los gastos financieros que tiene la compañía.
Todos los indicadores varían según la industria, e incluso dentro del mismo sector.
Sector construcción
Las cinco empresas analizadas del sector construcción acumulan una deuda total de $1,4 millones de millones, y en promedio el 64% de estos pasivos vence antes de un año; es decir, unos $935.530 millones. De este monto, un poco más de la mitad son obligaciones contraídas con la banca o el público, siendo el sector que podría verse más expuesto a un endurecimiento de las entidades financieras si llegara a verse afectada la liquidez del mercado.
Yendo a casos particulares, la deuda de corto plazo representa el 88% de los pasivos totales tanto de Ingevec como de Socovesa, lo que está por sobre el promedio del sector. En el primer caso, el 40% de las obligaciones corrientes son con entidades financieras. Cabe señalar que Ingevec realizó un aumento de capital con el fin de disminuir su endeudamiento. Socovesa, por su parte, tiene una proporción mayor tomada con la banca.
También resaltan los casos de Salfacorp y Paz Corp, donde el ratio Ebitda/gastos financieros es menor al que se suele estipular como óptimo por los acreedores.
Sector eléctrico
Las empresas del sector eléctrico mantienen una estructura de endeudamiento sana, teniendo que responder sólo con el 30% de los pasivos antes del primer trimestre del año entrante y un tercio de las acreencias debe ser pagado a tenedores de papeles o entidades financieras. Esta área de la industria es relevante, porque el 32% del endeudamiento contraído por el total de las sociedades analizadas pertenecen al rubro electricidad.
Llama la atención Chilectra, que si bien acumuló el 74,5% de los pasivos en el corto plazo, sus obligaciones con el sistema financiero son mínimas. La sociedad disminuyó los pasivos exigibles (de corto y largo plazo) en $32.364 millones respecto a diciembre de 2011 y registró a marzo un incremento en cuentas por pagar a empresas relacionadas que vencen a menos de un año de $13.667 millones.
Sector forestal
Las tres empresas clasificadas en el sector forestal tienen espacio suficiente para sortear una situación de iliquidez. De los $6,2 millones de millones que tienen en pasivos, sólo el 20% les vence en el corto plazo. Sin embargo, la deuda con el sector financiero apenas representa el 27% de las obligaciones que caducan antes de marzo de 2013 y respecto a diciembre redujeron el monto de los pasivos con estas entidades.
El sector retail
El endeudamiento total de las empresas del comercio analizadas llega a $15,3 millones de millones, lo que representa el 29,3% de los pasivos de las 52 sociedades estudiadas. De ese monto, el 41% se encuentra en el corto plazo y los promedios más bajos están ligados a las empresas que apuntan al arriendo de espacios, como el caso del grupo Plaza y Arauco.
En tanto que Hites y La Polar presentaban a marzo sobre el 80% de sus respectivas deudas en el corto plazo, y en este tramo, el 55 y 85% lo tenían comprometido con el sector financiero. Hites anunció en mayo que había reestructurado sus pasivos, lo que implicaría una mejoría en sus índices de liquidez, en tanto que La Polar pudo aprobar su aumento de capital con este mismo objeto.
Por su parte, SMU también informó que emitió deuda con el fin de prepagar o pagar pasivos de corto plazo y Walmart notificó una colocación de bonos para reestructurar pasivos, entre otros fines. Cencosud ocupará el aumento de capital que acaba de finalizar para mejorar sus indicadores.
Sector pesquero
El sector pesquero que reúne a empresas ligadas a la salmonicultura y a la harina de pescado tiene un promedio de endeudamiento en el corto plazo que llega al 48% del total.
Entre el cierre a diciembre de 2011 y el cierre a marzo de 2012, las empresas elevaron su endeudamiento corriente en 20% en tan sólo 3 meses, estando el 36% tomado con instituciones financieras o el público.
Las empresas que vieron aumentar sus pasivos de corto plazo por sobre ese promedio son Invertec (124%), Cultivos Marinos (21), Camanchaca (37%), Iquique-Guanaye (22,9%) y Multiexport (26%).
Sector minero
El sector minero presenta un endeudamiento de $11 millones de millones que pesa cerca del 21% del total de las 52 sociedades incluidas. De ese total de acreencias, sólo el 31% se encuentra en el corto plazo y poco más de un tercio de este tramo corresponde a deuda con el sector financiero u obligaciones con el público.
Molymet capta la atención porque en el primer trimestre de este año incrementó sus pasivos corrientes en 77%, sumando $251,7 mil millones. La empresa explicó que el mayor endeudamiento a corto plazo conseguido durante el año responde al mayor nivel de liquidez requerido por la administración para llevar a cabo su plan de inversiones. Dentro de este contexto, la semana pasada anunció una emisión de bonos en México.