Santiago,
Chile. 16 mayo, 2012. Toda la estructura del proyecto Costanera Center requiere de 24
megawatts de electricidad para funcionar, lo mismo que todo el caso antiguo de
Valparaíso. Y la lista de récords es larga.
Con las
85.000 toneladas de acero utilizadas en su estructura se podrían construir 10
torres Eiffel. Y si la torre principal mide 300 metros de alto, al amanecer
proyecta una sombra de casi 2 kilómetros de largo.
Casi 300
cámaras de seguridad
Las áreas
comunes de la torre -incluidos los 41 ascensores- tendrán cámaras de
vigilancia. En cada piso habrá por lo menos tres cámaras, lo que lleva a un
total de 297 cámaras, sólo preocupadas de la vigilancia del edificio más alto.
Tamaño volumen de información será distribuido entre muchas personas, que
también deberán poner ojo a las cámaras de los tres niveles donde se ubicarán
las máquinas, en una sala en la cual se desplegarán las pantallas. Esos
funcionarios también se encargarán de monitorear el funcionamiento del aire
acondicionado.
350.000
metros cúbicos de concreto
El
Costanera Center ocupará 350.000 metros cúbicos de concreto, con lo que podría
pavimentarse una carretera de alrededor de 160 kilómetros, semejante a la
distancia entre Santiago y La Ligua. De estos 350.000 metros cúbicos, unos
10.000 están en la base de la torre principal, que no tiene pilares sino un
sistema de lastre tipo “mono porfiado”, de 60 por 60 metros, y 2,5 metros de
altura. La base estará bajo los cinco niveles de estacionamientos y del sistema
de ventilación -con 2,5 kilómetros de tuberías- que purificarán el aire de los
aparcamientos.
5.700
estacionamientos para autos
Los 5.700
estacionamientos para vehículos particulares que tendrá el centro comercial en
sus cinco niveles son apenas una parte de los vehículos que podrán ingresar al
complejo (en la primera etapa sólo funcionarán 3.000). Un ingreso por avenida
Andrés Bello conducirá a un estacionamiento con capacidad para que 24 camiones
(de seis ejes) puedan realizar trabajos simultáneamente. Podrán efectuar igual
maniobra 15 camionetas.
En la
torre, asimismo, habrá dos ascensores exclusivos para mover insumos. En el mall
habrá otro más -en total serán nueve los elevadores del centro comercial-…
donde incluso puede entrar un auto.
Ascensores
de 2 pisos y transbordos
Con sus
64 pisos, la “Gran Torre Costanera Center” es sólo “la punta del iceberg” de
esta obra. Para que la gente pueda moverse sin problemas por el edificio habrá
45 ascensores Y tendrán una novedad inédita en Chile: 38 de ellos serán de dos
pisos y podrán mover 40 personas en cada viaje. Algunos subirán a una velocidad
de 10 metros por segundo (cuando lo usual es hacerlo a una velocidad de 3 m/s).
Quienes
quieran llegar al último piso deberán hacer un transbordo en los pisos 44 o 43.
Las cabinas estarán presurizadas, como un cohete.
25.000
metros cuadrados “verdes”
Sobre el
techo del mall , se instalará una serie de máquinas. Entre ellas 8 generadores
que producirán 24 MW de electricidad y que podrán seguir alimentando todo el
complejo en el caso de que se interrumpa el suministro de energía provisto por
Santiago. En este mismo sitio se encontrarán los sistemas de aire
acondicionado, que van a ocupar agua del cercano canal San Carlos, para ahorrar
23 millones de metros cúbicos de agua potable al año.
Sobre
estos mecanismos habrá una cubierta vegetal de 25.000 metros cuadrados,
equivalente a 3,8 veces el Parque de las Esculturas de Providencia -casi 3
canchas de fútbol profesional-, destinada a proteger los artefactos de la
corrosión y absorber gases invernadero.
Otras
curiosidades en boca del arquitecto responsable
“Si
alguien quiere colocar un enchufe en un muro o en un pilar, se va a topar con
que es imposible. No va a poder penetrar el concreto por la densidad de la
mezcla y el número de varillas de acero que hay en su interior”. Así grafica el
arquitecto Ives Besancon la consistencia de los soportes de la denominada
“Torre 2″ del Costanera Center (la principal).
Su
oficina de arquitectos -«Alemparte, Barreda, Wedeles, Besancon arquitectos y
asociados»- estuvo a cargo del diseño de la megaestructura, junto con el
especialista argentino César Pelli. Besancon no escatima referencias para
destacar la importancia del trasandino: estuvo tras las Torres Petronas en
Kuala Lumpur (88 pisos repartidos en 452 metros y 78 ascensores) y el
International Finance Center en Hong Kong (88 pisos en 412 metros de altura,
con 62 ascensores). Este último, de hecho, tiene hasta cierto parecido estético
con la obra de Sanhattan.
Desde un
comienzo, asegura Besancon, el Costanera Center se dedicó a marcar hitos.
Mientras en las Torres Petronas rompieron los moldes con un sistema de
inyección de concreto continuo en los cimientos, en Costanera Center lo
hicieron sus 14 grúas con un GPS guiado desde Alemania, que impedía que las
brazos de estas maquinarias se estrellaran entre sí.
Mientras
revela las cifras más increíbles del proyecto, en su oficina de la Torre Santa
María, el que alguna vez fue el edificio más alto de Chile, inaugurado en 1980
emulando al World Trade Center de Nueva York. “Esta torre -dice- tiene 3,35
metros entre piso y cielo. La torre 2 del Costanera, en cambio, tiene 6 metros
de separación (hasta el 5°) y de ahí hacia arriba la altura de cada piso es de
4,10 metros”, indica. En el frontis los visitantes serán recibidos por una
escultura hecha en acero inoxidable por María Angélica Echavarri , de 8 metros
de altura por 14 metros de largo.
Aquí nada
queda al azar. Besancon añade que, por ejemplo, las dos escaleras de escape que
tiene la torre contemplan descansos presurizados, cada cierto número de pisos:
“En China esos descansos deben estar cada once pisos. Están hechos para que en
caso de emergencia, las personas que se cansan pueden apartarse de la ruta y
recuperarse, permitiendo que el resto pueda seguir bajando”, indica.
Antes las
críticas sobre lo “apoteósico” de su obra, Besancon indica que la zona
comercial del proyecto tiene 41,5 metros de altura: “Y una cuadra comercial en
el centro de Santiago está compuesta por edificios de 41 metros de altura.
Entonces no entiendo ese reclamo”.
Finalmente,
sostiene que todo el complejo del Costanera Center tiene una superficie
semejante a cuatro cuadras del centro capitalino. Y como guinda de la torta,
cuenta que su proyecto tendrá un sistema que subirá el agua potable a pisos
superiores de la torre, permitiendo que la presión del agua al salir sea “como
si las llaves estuvieran a la altura de la calle”.
Fuente: La segunda.