- Expansión sobre el 5%, remuneraciones al alza, escenario de pleno empleo y escasez de mano de obra caracterizan hoy a la economía chilena, que aún en este boyante panorama mantiene los empleos fiscales directos…
Fuente: Pulso
Santiago, Chile. 30 noviembre, 2012. La culpa la tuvo la crisis asiática. Bajo el gobierno de Eduardo Frei Ruiz -Tagle, la desocupación llegó a 2 dígitos y para frenarlo se crearon los “empleos directos con apoyo fiscal”, es decir, los que apuntan a enfrentar la emergencia y son de baja calificación. Desde ese año a la fecha, se sumaron 2 categorías: los indirectos (de fomento al empleo, subsidios a la contratación, sistemas de capacitación, aporte fiscal a los salarios de los trabajadores más pobres) y los de inversión pública (proyectos de infraestructura financiados por el Estado).En 2006, al aprobarse la Ley de Responsabilidad Fiscal (20.128), se estableció que estos empleos se activarían una vez que la tasa de desocupación trimestral superara el promedio de los 5 años anteriores, o cuando fuera igual o superior a 10%.
Es en base a esta norma donde surgen los primeros cuestionamientos por el alto número de empleos fiscales que se mantienen a la fecha, dado el escenario de casi pleno empleo en el país, con una tasa de desocupación que llegó a 6,5% en julio-septiembre.
¿Un exceso a estas alturas?
Desde que se tiene registro de los empleos con apoyo fiscal (2005), éstos han ido en aumento, con leves períodos de baja. Ahora, si se evalúan los terceros trimestres, ya que es el último informe emitido este año, se observa que en 2005 el total de empleos con apoyo fiscal alcanzaba a 155.421. De éstos 23.029 eran directos y la tasa de desocupación llegaba a 9,8% promedio nacional.
Durante el tercer trimestre de este año, el total de empleos con apoyo fiscal llegó a 383.015, de los cuales 30.681 son directos, y con una tasa de desempleo nacional de 6,5%. Sin embargo, en el cálculo de este año la Dipres informó que en la ejecución de los Programas PAME, vinculado a la cartera de Desarrollo Social (MDS), se excluyeron iniciativas como apoyo a actividades económicas, Emprende Más, Empleabilidad Juvenil, y otros, que hacen que la línea de estos programas baje de 16.761 a 1.079 cupos.
Respecto a la exclusión de estos programas la Dipres aseguró que “desde enero a septiembre de 2011, en los programas de empleo directo se informaron los ejecutados por Fosis: los programas de apoyo al Microemprendimiento. Sin embargo, el último trimestre de ese año, se aprueba un convenio de colaboración entre el MDS, Fondo de Solidaridad e Inversión Social y Ministerio del Trabajo, para coordinarse con los programas de Apoyo al Microemprendimiento regular y Chile Solidario, Emprende Más, Apoyo a Actividades Económicas, Empleabilidad Juvenil regular y Chile Solidario, Apoyo a Emprendimientos Sociales y Preparación para el Trabajo regular y Chile Solidario, cuya ejecución fue incorporada en el IV trimestre del año 2011. Para que las bases de datos fuesen homogéneas entre los años 2011 y 2012, este año sólo se informan los datos de ejecución de las PAME, y se hace una referencia en cada Informe de los Programas de Empleo con Apoyo Fiscal de la ejecución total de los otros programas”.
Para el economista de la consultora Gemines, Alejandro Fernández, existe una contradicción entre lo que se observa en la evolución de los empleos con apoyo fiscal y lo que ocurre en la economía del país. “Uno pensaría que en las circunstancias actuales, la magnitud de estos empleos debería ser muy reducida respecto de lo que uno observaba 2 o 3 años atrás cuando el desempleo estaba más cerca de los 2 dígitos. Sin embargo, hoy no es así, por lo que es una situación que no tiene mucha justificación económica”, advirtió.
Esta visión es compartida por el economista de la U. Central y ex asesor de Hacienda y de la Dipres en 2006, Enrique París, quien puntualizó en los empleos directos, que a su juicio son los que se han mantenido con el tiempo, a diferencia de los empleos indirectos que “son los que más se mueven cuando sube o baja el desempleo”.
“En este gobierno hay nula gestión para reducir los empleos directos. Mi impresión es que probablemente no estén cumpliendo con la Ley, no sólo la 20.218, sino también respecto lo que establece la Ley de Presupuestos y los requisitos que rigen la Subsecretaría del Trabajo, a través de los programas Sence”, aseguró París.
El economista de la U. de Chile, Joseph Ramos, señala que el alto número de empleos con apoyo fiscal, sobre todo directos, creados este año son inconsecuentes con el objetivo con el que se creó el programa, que era apoyar a las personas en períodos complejos, tal como ocurrió en 1999, 2008 y también en el año 2010, en que producto del terremoto y tsunami que azotó a la zona centro sur del país, se llegaron a crear 511.935 empleos con apoyo fiscal, de los cuales 77.701 fueron directos. “Uno esperaría que este fuera un instrumento contracíclico, que aumentaría fuertemente en periodos recesivos y que disminuiría hasta desapareceer en períodos de pleno empleo”, sostuvo.
Y ahora, ¿se pueden reducir?
Los expertos dicen que a fines de 2010 y principios de 2011 estos empleos debieron comenzar caer, tras la recuperación económica, el bajo desempleo, el alza en las remuneraciones y la escasez de mano de obra. Sin embargo, creen que estos trabajos tienen un sentido político, por lo que en un año electoral como 2013 será muy difícil disminuirlos, por lo que la tendencia sería mantenerlos o incluso aumentarlos.
“Políticamente hacerlo ahora es muy difícil porque estamos entrando en un año electoral, los incentivos están para mantener o aumentarlos. No me cabe duda que estos empleos se debieron reducir hace un par de años. Desde que crearon estos empleos, siempre representaron un porcentaje relativamente bajo de la fuerza de trabajo y sólo se incrementaron y se mantuvieron altos poscrisis económica internacional (2008), ahí se produjo un alza que no sólo se revirtió cuando comenzó la recuperación de la economía, sino más bien ha tendido a ampliarse”, aseguró Fernández.
París añade que también dependerá de los compromisos que se hayan gestando entre el gobierno y las regiones, comunas y provincias, ya que al ser trabajos temporales, que muchas veces se extienden en el tiempo son difíciles de ir eliminándolos.
El retiro de estos planes, a juicio de Ramos podría tener un leve impacto en el desempleo y en las remuneraciones: “sin duda estas personas que trabajan en este tipo de empleo hacen que la tasa de desocupación baje, pero tal vez por cada 2 que trabajan en estos programas 1 se declara cesante, por lo que el impacto sería menor”.
Análisis de la normativa: Empleos fiscales se activarán cuando el desempleo sea de 10% o más
De acuerdo con el artículo 10 de la Ley de Responsabilidad Fiscal, aprobada en 2006 durante el gobierno de Michelle Bachelet, el Programa de Contingencia contra el Desempleo, que son los de apoyo fiscal, “operarán cuando la tasa nacional de desempleo trimestral , calculada por el Instituto Nacional de Estadística, exceda el promedio de dicha tasa correspondiente a los 5 años anteriores publicados por dicho instituto o cuando la tasa nacional de desempleo trimestral sea igual o superior al 10%”.
Enrique París, quien participó en la redacción del artículo, cuando se desempeñó como asesor de Hacienda, recalca que en la Ley de Presupuestos, también existe una glosa que establece que se usarán recursos del Tesoro, para financiar programas con apoyo fiscal cuando la tasa de desempleo supere el 10%. Desde la Dipres señalan que “gran parte de los empleos directos cuentan con recursos financieros en la Ley de Presupuestos de cada año, y sólo dos programas directos son activados con financiamiento extraordinario cuando se cumplen las tasas de desempleo determinadas (Ley N°20.128 ). Estos son los Programas de Empleos de Emergencia que se ejecutan a través de CONAF y el Programa de Inversión en la Comunidad en sus líneas SENCE e Intendencia, que se ejecuta a través del Ministerio del Trabajo y Previsión Social”.