- El decano de Arquitectura UDD cree que el sello de los nuevos ediles irá de la mano de la participación ciudadana y no de pelearse con las inmobiliarias.
Fuente: Pulso
Santiago, Chile. 31 octubre, 2012. ¿Cambios? Sí, y muchos. ¿Radicales? Difícil. Así plantea el decano de Arquitectura de la Universidad del Desarrollo y experto en desarrollo urbano, Pablo Allard, que es lo que viene respecto del panorama en la zona centro-oriente de Santiago, a propósito de los cambios de mando en Providencia, Ñuñoa, Santiago y La Reina. Pero los anuncios de un aumento en la participación de los gobiernos comunales y un énfasis en la calidad de vida (si es que las gestiones efectivamente responden a las demandas de quienes los eligieron, que piden estas prioridades), se contraponen a una creciente presión de los chilenos por vivir en las comunas con mejor calidad de vida de la capital.¿Espera muchos cambios en las comunas que cambiaron alcalde en Santiago?
Yo creo que sí. Estamos ante un fenómeno que no solamente tiene que ver con las redes sociales o el hecho de que, por ejemplo, en Recoleta hayan peleado dos candidatos de la Alianza, sino que también, de acuerdo con lo que conozco a Daniel Jadue en Recoleta y Josefa Errázuriz en Providencia, vienen trabajando hace mucho tiempo el tema de la gestión local, de poder incorporar mayor participación, hacer una gestión que no solamente sea de excelencia en términos de gestión y calidad de servicio, sino que en la búsqueda de una ciudad más humana. En ese sentido, ellos tienen una agenda que claramente no es de continuidad, sino que también de reforma importante en la gestión de esos municipios.
¿Esta situación derivará en mayores exigencias para las inmobiliarias?
Va a ser muy interesante, porque tanto Josefa Errázuriz como Daniel Jadue son personas que conocen bastante bien las dinámicas inmobiliarias. Recordemos que Josefa fue dirigente vecinal y fue presidenta de la organización Fundación Ciudad Viva, que es una de las organizaciones ciudadanas más proactivas y que han hecho cosas muy interesantes para preservar el carácter de barrios en Bellavista y otros sectores. En el caso de Daniel Jadue, él es un arquitecto urbanista que se ha especializado en temas de planos reguladores y otros. Yo pienso que ninguno de ellos ve a las inmobiliarias como especies de monstruos terroríficos, sino que claramente van a tener que manejar y conducir mecanismos para temas propios de sus comunas en equilibrio con las preocupaciones de los vecinos que los eligieron, que claramente pretenden y buscan legítimamente mantener la identidad de los barrios y evitar que haya una saturación vial y una construcción desproporcionada a la realidad de cada barrio. Creo que vamos a ver gestiones apelando a cierto equilibrio. Acá no es un tema de inmobiliaria versus vecinos, porque finalmente las inmobiliarias responden a demandas de gente que quiere vivir en esos buenos barrios. Así que como conducen esas dinámicas va a ser algo interesante en esos casos.
¿Por lo tanto, estos cambios no serían radicales?, ¿No debería esperarse cambios en los planos reguladores?
Es que tampoco depende de un alcalde cambiar o no cambiar un plano regulador. Acá claramente son procesos de largo plazo, donde hay toda una serie de instancias de participación, donde además se pronuncia un concejo comunal. Por tanto, el hecho de que un edil cambie no significa que vengan modificaciones de planos reguladores o modificaciones casi autoritarias. No. Acá el cambio debería ser tomar como punto de partida la buena gestión que habían hecho las administraciones anteriores y avanzar hacia una gestión un poco más humana y participativa a los problemas de la gente. Y si en esos conflictos los problemas inmobiliarios empiezan a generar ruido, ahí vamos a ver cómo van a ser capaces de contener las expectativas de quienes votaron por ellos versus las necesidades de sus comunas.
¿Es la construcción en altura el único futuro para la ciudad?
El tema no pasa por blanco o negro; construir en altura versus mantener los barrios residenciales como estaban. Creo que el mejor ejemplo de eso es Providencia. Esta comuna, históricamente, ha sido capaz de generar un desarrollo armónico entre vivienda y construcción en altura, pero preservando el carácter del barrio. Es cosa de recorrer el sector de Lyon, Holanda o Hernando de Aguirre para darse cuenta de que Providencia logró mantener una cierta calidad de ciudad jardín con una presencia fuerte del verde y con un manejo interesante de los edificios. Así que no pasa por mayor o menor altura, pasa por cómo se trabaja para generar las condiciones para ver cómo el desarrollo, que va a llegar igual, sea conducido en forma positiva tanto para los vecinos existentes como los nuevos que vayan llegando a la comuna.
Además del centro y de Providencia, ¿hacia qué otras zonas debería expandirse la construcción de edificios?
Eso no tiene nada que ver con las elecciones municipales. Yo creo que uno de los barrios que va a comenzar a tener dinámicas importantes es toda la frontera sur de la comuna de Santiago, particularmente desde Vicuña Mackenna con Isabel Riquelme hacia lo que es el sector del Zanjón de la Aguada, cerca de Club Hípico. Allí se está construyendo el parque de La Aguada, que va a generar más de 24 hectáreas de áreas verdes donde antes había una cloaca abierta. Además, se va a construir la línea 6 del metro. A esto hay que sumar estaciones de ferrocarriles abandonadas y paños disponibles. Otro fenómeno interesante en esta zona es la ex fábrica Machasa y el estudio de TV de Chilevisión, que va a generar un pequeño polo de desarrollo que van a potenciar toda una dinámica de recuperación de ese bario, donde probablemente vamos a ver proyectos en densidad. Ese es el próximo barrio que va a tener un desarrollo interesante. Es de esperar que la alcaldesa Tohá pueda también manejar en forma más armónica las presiones y dinámicas que se van a dar en el sector.
¿Qué ocurrirá con los espacios públicos, las ciclovías? Las demandas de quienes levantaron estas candidaturas tienen esas prioridades.
Más que cambios en esas líneas vamos a ver más énfasis. Josefa Errázuriz viene de una experiencia en la fundación Ciudad Viva, que ha sido uno de los grandes promotores de ciudades más sustentables y claramente, en ese contexto, las ciclovías van a ser parte importante de su gestión y así lo esperamos. Pero hay que reconocer que el alcalde Labbé también había desarrollado un sistema de ciclovías y bicicletas arrendadas. Entonces, esperamos más énfasis y no golpes a la mesa.